La policía ha desarticulado una red de piratería musical en la que se han incautado de 25.000 discos compactos piratas, así como de diverso material informático en una operación en la que han resultado detenidas 14 personas de Bangladesh y Senegal. La acción ha permitido también el desmantelamiento de un centro de producción, almacenaje y distribución de discos compactos piratas.
Fuentes policiales consideran que con el material informático incautado -funcionando la mayor parte del día- se podían generar unos 5.000 discos por día, lo que supone 150.000 unidades mensuales, con un costo defraudado estimado en más de un millón de euros. En la operación se han intervenido seis torres informáticas de grabación, con 29 grabadoras; seis cabezas lectoras, miles de carátulas en color, carcasas, guillotinas y otros útiles propios de la confección de los discos compactos, de DVD's y videojuegos.
La investigación comenzó a raíz de una denuncia presentada por un representante de la AFYVE (Asociación Fonográfica y Videográfica Española), tras la que la policía inició el seguimiento de varios vendedores de los conocidos top manta, quienes compraban los discos piratas en tres viviendas de los números 42, 65 y 83 de la calle Amparo, de Madrid.
Desde aquí, la policía consiguió ubicar el centro de almacenaje, localizado en el piso bajo del número 13 de la calle Valencia, también de la capital, donde fueron requisadas 17.000 unidades que estaban dispuestas para su comercialización. El siguiente paso fue determinar el lugar donde se reproducían los discos piratas, lo que llevó a los investigadores a una vivienda del número 14 de la calle Doctor Fourquet, donde 29 grabadoras funcionaban día y noche, con una producción media de 150.000 unidades al mes.