El Gobierno de Irak ha insistido en que no aceptará el proyecto de resolución que Washington planea presentar a la ONU sobre el desarme de ese país y ha advertido a EE UU de que "si ataca sufrirá pérdidas sin precedentes". Así lo ha expresado el vicepresidente iraquí, Taha Yasín Ramadán, quien ha añadido que "cualquier nueva medida que tenga como objeto dañar a Irak no será aceptada".
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Ramadán aludía con esto a la aceptación por Irak, el pasado día 16, del retorno incondicional de los inspectores de la ONU que abandonaron el país en 1998, medida con la que Bagdad intenta evitar una acción militar estadounidense y británica. EE UU, por su parte, ha preparado un borrador de resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que, según fuentes norteamericanas, incluye un ultimátum de siete días para que el régimen de Sadam Husein, informe de todas las armas no convencionales de que dispone.
Además, de acuerdo a este borrador, reclama que se permita el acceso total de los inspectores a los palacios de Sadam Husein y obliga a Bagdad a facilitar inmediatamente una lista con todos los materiales prohibidos que posee. Si Irak no cumple, la resolución podría amenazar con usar "todos los medios necesarios" en su contra, lo que en el lenguaje diplomático significa la autorización al uso de las armas.
"Lo que están buscando es una justificación que les permita lanzar una agresión contra Irak", ha añadido Ramadán, quien ha acusado a Washington y Londres de "haber comenzado una acción con objetivos imperialistas y sionistas, no sólo contra nuestro país, sino también contra otros Estados árabes".
"Una violenta batalla
El viceprimer ministro iraquí, Tarek Aziz, ha advertido también de que su país "combatirá" si es atacado por EE UU, y ha asegurado que, en ese caso, "los estadounidenses sufrirán pérdidas que no han padecido desde hace decenas de años". "No se tratará de una excursión estadounidense, sino de una violenta batalla", ha pronosticado.
Las advertencias de Aziz coinciden con una visita que el ministro iraquí de Asuntos Exteriores, Nayi Sabri, ha iniciado en Irán con un mensaje de Sadam Husein a su colega iraní, Mohamed Jatamí. Aziz tiene previsto viajar la semana próxima a Turquía, vecino norte de Irak, con el mismo objetivo. Irán y Turquía, al igual que los demás países musulmanes han expresado su oposición a un ataque de EE UU a Irak, así como a una nueva resolución del Consejo de Seguridad contra ese país.