El disparo que ayer hirió gravemente a un adolescente de 13 años en un suburbio de Washington tiene relación con los otro siete ataques que han dejado seis muertos en la región desde el pasado miércoles, según ha informado la policía, que ha asegurado que la investigación está avanzando.
El adolescente años permanece en estado crítico tras ser disparado al entrar con su madre en un colegio del condado de Prince George, muy próximo al área de Maryland donde han muerto en los últimos días seis personas por disparos del francotirador que utiliza un arma de gran calibre para cometer sus crímenes.
"Los análisis muestran que el disparo está vinculado" a los realizados en el condado de Montgomery (Washington) y en Virginia por un tirador aislado, ha declarado el policía federal Joe Riehl a la prensa. Por su parte, el jefe de la policía del condado de Prince George, Gerald Wilson, se ha manifestado "confiado" de que el asesino será atrapado y ha indicado que varios testigos estaban siendo interrogado.
Seis muertos y dos heridos graves
De confirmarse, ésta sería la octava víctima desde que el pasado miércoles un francotirador matase a cinco personas en el condado de Montgomery, cerca de la capital estadounidense, en un periodo de tan sólo 17 horas. La sexta víctima, un hombre de 72 años, fue asesinado mientras paseaba por Washington la noche del jueves. El viernes una mujer resultó herida con un arma similar en Fredericksburg, en el estado de Virginia, a unos ochenta kilómetros al sur de Maryland, presumiblemente a manos del mismo tirador.