La orden dada por el Gobierno israelí a su Ejército para retomar los asesinatos selectivos de dirigentes radicales palestinos ya ha sido cumplida. Esta mañana, en un ataque lanzado con misiles desde un helicóptero de combate, el Ejército ha abatido a un dirigente islámico de la ciudad de Gaza. Otras dos personas que le acompañaban en el coche en el momento del ataque han muerto.
Un F-16 israelí ha disparado varios misiles contra un coche en el que viajaban el líder de Hamás en Gaza, Isamail Abou Chanab y los dos guardaespaldas que le acompañaban. Vecinos de Gaza han asegurado que los helicópteros han disparado al menos cinco misiles y que el ataque ha tenido lugar en el céntrico barrio de Rimal. El vehículo ha quedado totalmente destrozado y los cuerpos calcinados. El primer ministro palestino, Abu Mazen, ha condenado el asesinato, advirtiendo de que perjudicará a sus esfuerzos para pacificar la zona, más aún cuando ayer decidió emprender una campaña de arrestos contra militantes de Hamás y la Yihad.
Por su parte, el Gobierno de Sharon decidió ayer reanudar sus incursiones en ciudades de Gaza y Cisjordania -hoy, soldados israelíes han entrado en las localidades de Tulkarem, donde han matado a dos personas, Yenín, Nablus y Hebrón, donde han demolido la casa del autor del atentado del martes-, y ejecutar nuevamente los asesinatos selectivos de jefes del alzamiento palestino tras el sangriento atentado que costó la vida de 20 personas en Jerusalén. Los asesinatos selectivos y las incursiones militares en las ciudades y en los campos de refugiados se habían cancelado tras el anuncio, el pasado 29 de junio, de una tregua por parte de las facciones de la resistencia palestina.
Aunque no ha sido más que una redundancia, dado que Hamas y la Yihad Islámica se atribuyeron conjuntamente el atentado del martes, Hamas ha decretado el fin de la tregua que mantenía desde el 29 de mayo a raíz del asesinato de su líder en Gaza.
Presión de la comunidad internacional
Mientras, en la sede de la ONU en Nueva York, el secretario de Estado de EE UU, Colin Powell se ha referido al maltrecho proceso de paz en Oriente Próximo, reclamando de la comunidad internacional un aumento de la presión sobre Hamas para que cese sus ataques contra Israel. Igualmente, ha lanzado una llamada a que no se abandone la Hoja de Ruta, el último proceso de paz en la región.
"LLamo a mis colegas y al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y al resto de representantes de la comunidad internacional, incluyendo a los representantes de los países árabes a intervenir e insistir para que las organizaciones como Hamas interrumpan sus acciones", ha dicho Powell, acompañado del secretario general de la ONU, Kofi Annan. "Esto no es el fin de la Hoja de Ruta. Estoy seguro de que las dos partes comprenden que hay que encontrar una solución para progresar. ¿Cuál es la alternativa? ¿Más muerte y destrucción? ¿Dejar que los periodistas ganen la partida? No, ese es un resultado inaceptable", ha sentenciado.