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CRÓNICA

El Camp Nou se rinde al Athletic

El Barça pierde su condición de invicto en su estadio ante un rival inexpugnable y superior incluso jugando con uno menos

Adiós a la euforia de Liverpool en el Barça y a la posibilidad del liderato, ni siquiera de forma provisional, como ayer se le planteó. Todavía atormentado por el 7-0 del año pasado, el Athletic se tomó anoche la revancha de una de las páginas más negras de su historia y dio un par de bofetadas al Barcelona en el Camp Nou, que sufrió la primera derrota de la temporada en su feudo, víctima de su falta de pegada e incapacidad para generar ocasiones de gol. A la hora del recuento pesó más la tarjeta de mejor visitante (cinco victorias en siete salidas) del Athletic, un equipo mejor organizado y que negó al rival tanto en igualdad como en inferioridad de condiciones.

BARCELONA 1| ATHLETIC DE BILBAO 2

Barcelona: Bonano; Puyol, Andersson, Frank de Boer, Coco; Gabri, Xavi, Rochemback (Rivaldo, m.56); Kluivert; Saviola (Gerard, m.84) y Overmars. Athletic: Lafuente; Javi González, Óscar Vales, Lacruz, Felipe; Orbaiz, Tiko, Alkiza, Yeste (Carlos García, m. 61); Joseba Etxeberria (Ezquerro, m. 68) y Urzaiz (Murillo, m. 76). Goles: 0-1. M.10. Yeste lanza un libre indirecto y Urzaiz, anticipándose a Andersson, cabecea cruzado al palo derecho de Bonano. 1-1. M. 58. Andersson toca en largo, Kluivert asiste de cabeza para Rivaldo y el brasileño engatilla con la zurda desde el punto de penalti. 1-2. M. 80. Ezquerro sale disparado de la divisoria, supera a Andersson y bate a Bonano de disparo cruzado. Árbitro: González Vázquez. Mostró la tarjeta amarilla a Kluivert, De Boer, Rochemback, Alkiza, Andersson, Rivaldo. Expulsó a Lacruz (m. 75) y Alexanco (m.94). Unos 70.000 espectadores en el Camp Nou.

Los rojiblancos metieron dos goles, aprovechando sendos fallos de Andersson, con la precisión de un reloj: Urzaiz logró el primero en el arranque y Ezquerro, el segundo, cuando faltaban aún quince minutos y su equipo se había quedado con diez por expulsión de Lacruz. Faltos de remate, los azulgrana no pudieron contrarrestar toda esa eficacia ni siquiera con cuatro delanteros. Sólo quedó entre medias el golazo de Rivaldo, suplente en el inicio y que marcó cuando sólo llevaba tres minutos en el campo.

El Athetic sometió a las primeras de cambio a los azulgrana a una ducha de agua helada. El Camp Nou todavía se frotaba las manos por la victoria en Anfield cuando Urzaiz marcó. Yeste botó una falta desde la derecha y el navarro, superando a Andersson, cabeceó un balón que se coló limpiamente junto al palo. No cundió el pánico porque el gol había llegado pronto y faltaba aún un mundo para acabar el partido. Pero entonces, el Barcelona empezó a sufrir para poder hilvanar su juego. Xavi estuvo muy marcado por Tiko y los azulgrana movieron el balón con lentitud, les costó desbordar y les faltó remate frente a un rival trabajador y trabajado, que actuó con gran determinación y estuvo espléndido en la contención.

Fue Overmars el hombre que más desbordó por su banda, pero sus centros acabaron en nada porque la zaga del Athletic se defendió siempre con orden, con las líneas muy juntas y enviando un mensaje de por qué es el equipo más eficaz fuera de casa. El Barcelona llegó al área sin acierto: el extremo tuvo una ocasión con un potente chut que tocó Saviola y desvió fuera. Y otra más: Kluivert, con su juego entre líneas, asistió varias veces al pibito pero Lafuente, sobre todo en una ocasión, desvió el balón a córner cuando se cantaba el gol. Todo pudo cambiar antes del descanso pero Gabri, solo en el área, envió el balón a las nubes.

Amparado en el marcador, el Athletic siguió ahogando al Barça con rápidos contraataques. En diez minutos concentró tres ocasiones de oro: un disparo de Urzaiz que acarició el larguero; una falta que Yeste no supo rematar y un segundo disparo de este jugador que Bonano despejó. Rexach maduró entonces su decisión: se olvidó del resfriado de Rivaldo y el brasileño empezó a calentar ante el regocijo de la grada. Charly apostó fuerte y se la jugó: sustituyó a Rochemback y por primera vez en la temporada dejó a cuatro delanteros sobre el campo.

La recompensa llegó muy pronto porque Rivaldo logró el gol más rápido de su carrera. El zurdo llevaba sólo tres minutos en el campo cuando marcó: Xavi proyectó el balón en una falta cometida sobre el brasileño, Kluivert cabeceó el balón para Rivaldo, y el zurdo, a la media vuelta, colocó la pelota a la red de forma imparable. El partido mostró entonces su cariz más bronco con faltas constantes, juego interrumpido y una lluvia de tarjetas. La grada se calentó, cargó contra el árbitro y llegó el pique entre Rivaldo (amonestado) y Lacruz (expulsado por doble tarjeta). Quedaban quince minutos y el Barça creyó en la victoria. Falsa impresión. El Athletic se resituó mejor y obtuvo el gol de la victoria en una salida de Ezquerro, que se zafó de Andersson, igual de resacoso ayer que sus compañeros.Con una grada airada con el colegiado y un juego precipitado, el Barça no supo reponerse. Rexach desbarató el invento de los cuatro delanteros (Gerard sustituyó a Saviola) y acabó jugando peor contra diez que ante once. Rivaldo y Kluivert erraron dos remates finales y el Barça acabó perdiendo el primer partido del año en el Camp Nou que les aleja de un liderato que tenía a tiro.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 25 de noviembre de 2001