El doble se torció bastante antes de jugarse. La lesión en la base del dedo pulgar que impidió a Àlex Corretja saltar de nuevo a la pista junto a su inseparable Joan Balcells, allanó el camino a los americanos para colocarse con ventaja en la eliminatoria de cuartos de final de la Copa Davis que les enfrenta a los españoles en Houston. El número uno español fue sustituido por Alberto Martín, un jugador sólido que había ganado cuatro partidos de los 10 que había disputado en su carrera sobre hierba, pero que debutaba en la Copa Davis sin aviso previo. Y tanta sorpresa resultó excesiva.
Todd Martin y James Blake, el doble que los estadounidenses habían previsto desde el primer día, ganaron a Balcells-Martín por 6-1, 6-4, 6-4 en 1 hora y minutos. Estados Unidos se coloca ahora con ventaja de 2-1 en la eliminatoria. Hoy tiene dos buenas oportunidades para rematar la confrontación. En el primer partido, Andy Roddick debe enfrentarse a Corretja, si el español, que ayer pasó por el hospital para realizar radiografías que determinaran el alcance exacto de su lesión, puede regresar a la pista. Si no, será sustituido por Joan Balcells o por Beto Martín. El quinto punto lo jugarán Tommy Robredo y Pete Sampras.
La situación pasó de la euforia a la decepción a velocidad de vértigo. En cuanto se confirmó la baja de Corretja toda la estructura del equipo español se tambaleó. El esquema previsto se rompió y la solución no pasó de ser de emergencia. Aunque Balcells y Martín han disputado algunos dobles juntos, esta vez les falló todo. Tuvieron que saltar a la pista con demasiada premura, sin tiempo para mentalizarse e intentando recordar unos mecanismos olvidados que tal vez ni siquiera nunca habían existido.
No era la mejor forma para afrontar un partido tan trascendente, en una superficie poco conocida para los dos y ante un público que, evidentemente, quería su derrota. Y lo pagaron caro. Aun sin componer un gran doble y a pesar de que era su debut en la Copa Davis, Martin y Blake sacaron partido de la experiencia de Todd, se tomaron las cosas con calma y fueron marcando el ritmo del juego, sin dar apenas opciones a los españoles.
Tanto Balcells, que ofrece un rendimiento muy superior cuando juega con Corretja, como Martín se mostraron erráticos desde el principio y evidenciaron serios problemas con su saque. "Jugad más tranquilos y sin miedo", les dijeron los capitanes en el vestuario cuando el partido se suspendió por la lluvia con un set abajo y break cedido en la segunda manga. Ellos lo intentaron. Pero la misión que les habían encargado estaba cargada de veneno. Todo transcurrió con demasiada precipitación. Todo fue demasiado improvisado. Y el partido se les escurrió entre las manos a la misma velocidad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 7 de abril de 2002