Al menos 26 personas murieron y 33 resultaron heridas ayer cuando un avión de la compañía egipcia Egyptair con 64 personas a bordo se estrelló cerca del aeropuerto internacional de Cartago, en Túnez, según el último balance oficial de víctimas. A bordo del Boeing-737 viajaban 56 pasajeros y 8 miembros de la tripulación. Casi al mismo tiempo, en China, caía al mar otro avión con 112 personas a bordo.
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El avión de Egyptair, que hacía el vuelo 843 El Cairo-Túnez, tenía previsto aterrizar en Túnez hacia las cinco de la tarde (una hora menos en la España peninsular), pero al aproximarse al aeropuerto no consiguió abrir el tren de aterrizaje y se vio obligado a dar otra vuelta, en la que se estrelló. La torre de control del aeropuerto tunecino de Cartago confirmó que la tripulación del avión emitió una señal de socorro.
Según la compañía, el accidente se produjo a unos 2.000 metros de altitud en una colina de la zona conocida como Nahli, a unos cuatro kilómetros del aeropuerto de Cartago, en medio de lluvia y fuertes vientos con una velocidad de hasta 100 kilómetros por hora. Uno de los testigos que asistió al drama indicó que el avión cayó vertiginosamente y se partió en dos al estrellarse contra el suelo. Los restos del avión están esparcidos sobre la colina, adonde han llegado equipos de protección civil.
Entre los supervivientes se encuentra el piloto, pero los demás miembros de la tripulación han muerto, además de los dos agentes encargados de la seguridad del vuelo. No se ha facilitado la identidad de los pasajeros muertos. Anoche permanecían hospitalizadas 13 personas, una de ellas el piloto.
Mientras tanto, un avión de la compañía china Aerolíneas del Norte se precipitó al mar cerca de la ciudad de Dalian, en la provincia de Liaonig, al noreste del país, con 112 personas a bordo, 103 pasajeros y nueve miembros de la tripulación. El aparato, un MD-82, realizaba el vuelo Pekín-Dalian y, según testigos presenciales, cayó en picado a unos 20 kilómetros del aeropuerto de esa importante ciudad portuaria hacia las 21.30 horas locales (seis horas menos en España).
Los equipos de rescate habían recogido anoche del mar más de 50 cadáveres, según informó la agencia oficial Xinhua. "Las operaciones de rescate continúan pero existen pocas posibilidades de encontrar a alguien con vida", informaba la agencia sin citar las fuentes.
El piloto se puso en contacto con la torre de control e informó de que se había producido un incendio en la cabina e inmediatamente perdió el control del aparato.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 8 de mayo de 2002