Las empresas españolas, sobre todo las grandes, se enfrentan a un segundo año de caída de beneficios. Las inversiones en Latinoamérica, el fracaso de las licencias de telefonía móvil UMTS y las pérdidas en Bolsa se van a comer buena parte de los excedentes.
Inmobiliaria Colonial, controlada por La Caixa, reveló ayer que mantiene contactos con accionistas de sus rivales Bami y la participada de esta última, Metrovacesa, para una eventual fusión a tres bandas con el objetivo de crear la mayor inmobiliaria del mercado español, con un valor bursátil de 2.500 millones de euros.
La caída del crecimiento de la masa monetaria en la eurozona propicia una reducción de los tipos de interés por el Banco Central Europeo (BCE) en su próxima reunión del 5 de diciembre.
El presidente de CEOE, José María Cuevas, cree que los retos futuros para las empresas están en afrontar la inmigración y la ampliación de la UE y en estimular la inversión exterior. Cuevas coincidió ayer con el vicepresidente económico, Rodrigo Rato, en que el diálogo social ha sido clave para la modernización de España.