El nuevo Gobierno
La prudencia y la moderación caracterizan la figura y la carrera política de Solbes, que, sin embargo, ayer ofreció una auténtica e inusual demostración de fuerza que anticipa el clima de la legislatura en el área económica del Gobierno.
El nuevo ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, tiene fama de hablar claro. Y ayer hizo honor a su reputación. "En este país, todos los inmigrantes que sean necesarios, pero todos con contrato de trabajo", advirtió ya 24 horas antes de tomar posesión del cargo. "El fenómeno de la inmigración no puede funcionar nunca con la norma del último que se empadrone", añadió.
El proyecto de fusionar todas las fundaciones del PSOE, que figura en la agenda del secretario de Organización de ese partido, José Blanco, desde hace ocho años, se había pospuesto al imponerse otras prioridades, casi siempre de organización de elecciones. Ahora recibirá un impulso decisivo.
Los nuevos ministros del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero se despidieron ayer de los cargos que venían ocupando hasta ahora. Lo hicieron en varios actos que sirvieron, además, como presentación en sociedad, antes incluso de jurar o prometer su cargo (lo hacen hoy ante los Reyes) y, en ocasiones, también como tribuna para lanzar sus primeras ideas y prioridades al frente de sus carteras.
J. GARRIGA / M. NOGUER | Barcelona
Dos problemas mayores agitan el arranque de la novena legislatura: la mala situación económica y el deterioro de la administración de Justicia, que exigen soluciones urgentes. El presidente José Luis Rodríguez Zapatero tomará medidas en el Consejo de Ministros del próximo viernes para activar la economía y animar el consumo.
La Sala Especial del Tribunal Supremo se reúne esta mañana para examinar los recursos del Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV) y de Acción Nacionalista Vasca (ANV) contra la propuesta de su ilegalización que presentaron el Ministerio Fiscal y la Abogacía del Estado.
Todo este fin de semana ha durado el ofrecimiento. Una delegación de la Administración rumana, junto a empresarios del país -más de 25 personas en total-, han dispuesto en Castellón sendas jornadas informativas con un fin obvio: ofrecer casi 11.000 puestos de trabajo a los inmigrantes rumanos.
JOAN M. OLEAQUE | Castellón