El ex presidente de Serbia Milan Milutinovic ha partido esta mañana hacia La Haya para entregarse al Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY) que le acusa de crímenes de guerra en Kosovo. Milutinovic ha tomado en Belgrado un avión del Gobierno federal en compañía del ministro de Exteriores, Goran Svilanovic, el adjunto al ministro de Justicia, Nebojsa Sarkic y dos abogados.
El ex presidente fue inculpado en mayo de 1999 de crímenes contra la Humanidad en Kosovo durante el conflicto contra los independentistas albaneses, al igual que su antiguo colaborador, el ex presidente yugoslavo Slobodan Milosevic, y otros tres altos cargos.
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A cambio de su entrega voluntaria, Milutinovic ha obtenido garantías de los Gobiernos serbio y federal yugoslavo de que apoyarán ante ese tribunal su solicitud de permanecer en libertad provisional hasta el inicio del juicio. Esas autoridades explicaron hace unos días que esperan una respuesta positiva "por el hecho de que Milutinovic fue un presidente que cumplió con su mandato de forma democrática y por su difícil estado de salud". De hecho, está acompañado de un médico, ya que tiene problemas cardiacos.
El socialista Milutinovic finalizó el pasado 29 de diciembre su mandato presidencial de cinco años, que le proporcionaba inmunidad. En una reciente entrevista, Milutinovic declaró que no se siente culpable y que, según la constitución, no tenía competencias ni sobre el Ejército ni sobre la Policía.