El fiscal jefe de Castilla y León, José Luis García Ancos, arremetió ayer contra el jefe de la Inspección del Ministerio Fiscal, Juan José Martínez Zato, por la eventual apertura de diligencias informativas contra él -que se decide hoy- por su interrogatorio a la ex concejal Nevenka Fernández, el pasado martes, en el juicio que se sigue contra Ismael Álvarez, alcalde de Ponferrada, por acoso sexual y lesiones a la ex edil. García Ancos, que dice sentirse como un "sospechoso", anunció que pedirá "explicaciones" al fiscal general del Estado y aseguró que la polémica era "una bobada". "Parece que he matado a Manolete", afirmó.
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El fiscal jefe de Castilla y León mereció una llamada de atención por el tono de su interrogatorio por parte del presidente de la sala, José Luis de Pedro, quien le recordó que la ex edil era testigo y no acusada. García Ancos "violentó" a la joven, "le faltó al respeto" y "se lo hizo pasar muy mal", según dijeron ayer a este periódico su madre, Francisca García, y su abogado, Adolfo Barreda. El servicio de Inspección del Ministerio Fiscal anunció anteayer que abriría diligencias informativas para esclarecer el comportamiento del fiscal. Éste reconoció anoche en una entrevista en la Cadena SER que la formas que empleó en el interrogatoriono -"por acaloramiento o por cansancio"- no fueron las más adecuadas. "Soy el primero en reconocerlo", dijo.
García Ancos señaló ayer que no es la primera vez que se abren diligencias y luego se sobreseen y que le daba "exactamente lo mismo". "La inspección no puede actuar independientemente, no va abriendo diligencias por ahí. Yo me tengo que enterar quién ha sacado este bulo. Me oiría el señor [Juan José Martínez] Zato [jefe de la Inspección]. Quién es para abrir diligencias sin avisar. Las cosas se hacen bien y cuando no se hacen bien se piden explicaciones al fiscal general del Estado o al santo padre, y es lo que pienso hacer. Eso de enterarme por los medios, por radios, televisiones, sin decírmelo a mí. No encuentro adjetivos", subrayó el fiscal jefe de Castilla y León. García Ancos aseguró a la SER que el fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, le llamó ayer por la mañana para asegurarle que no tenía conocimiento de la apertura de las diligencias.
Más tarde, ante el cúmulo de manifestaciones en contra de su actitud en diversos colectivos sociales y políticos, incluso en las Cortes regionales en Valladolid, señaló que la polémica era "una bobada". "Parece que he matado a alguien", concluyó. El fiscal insistió en sus argumentos: "Lo que quiero es buscar la verdad de un asunto muy enconado donde las posiciones están encontradas".
Preguntado sobre un posible cambio de calificación o de opinión sobre el caso por el revuelo suscitado tras el interrogatorio a la ex concejal, señaló: "A mí no me cambia ni Dios cuando tengo una convicción, la mantengo pase lo que pase y punto, y si la Fiscalía General del Estado prefiere que se mantenga otra postura, que designe otro fiscal que entienda que va a ser más objetivo que yo, que no lo van a encontrar".
En la tercera sesión del juicio, ayer, testificó la madre de Nevenka. Francisca Fernández, de 49 años, reveló que en una entrevista con el alcalde, acompañado por el primer teniente de alcalde, Carlos López Riesco, el primero le confesó que estaba enamorado de la joven y que no podía resistir verla todos los días en el ayuntamiento sin estar con ella, que lo mejor era que se fuera.
La madre de Nevenka pidió al alcalde, incluso entre lágrimas, que mantuviera a su hija como concejal de Hacienda hasta el fin de la legislatura si lo hacía bien, a lo que ambos respondieron negativamente. "Sentí como miedo, un escalofrío, porque vi que eran dos personas frías y calculadoras que podían hacer mucho daño a mi hija", dijo la mujer.
En otro momento del interrogatorio, mucho más suave por parte del fiscal que el efectuado a su hija, Francisca aseguró a preguntas del abogado del alcalde, Luis Rodríguez Ramos, que su hija sólo pudo dar la conferencia de prensa de su dimisión, en marzo de 2001, cuando se lo permitieron los psiquiatras. "Su padre y yo éramos contrarios a dar a conocer todo, pero ella lo decidió por su dignidad personal y la apoyamos", afirmó.
Un testigo, trabajador de El Corte Inglés, quiso expresar su protesta ante la Sala por la polémica referencia sobre las cajeras de Hipercor, quienes, a juicio del fiscal García Ancos, tienen que aguantar que les "toquen el culo" porque es el pan de sus hijos.
De vuelta a Londres
Nevenka Fernández regresará en las próximas horas a su casa alquilada en un barrio de las afueras de Londres, donde vive desde hace meses. Hace casi un año, esta economistade 27 años decidió perfeccionar su inglés y buscar un futuro profesional en el Reino Unido, sobre todo por reducir la presión de una escena cotidiana que le era incómoda, después de formular una querella criminal contra un alcalde del PP y procurador en las cortes regionales por acoso sexual.
Para ello tuvo que trabajar en varios locales públicos, fregar platos en un fish and chips... Y familiarizarse con un idioma que había aprendido hace mucho en una academia madrileña.
Nevenka Fernández era hasta hace poco una leonesa más de las que van a Londres a trabajar. Hoy, forma parte de una empresa auditora americana. Su sueldo es 'bueno' y su estado de salud, también, aunque asegura que echa de menos el paisaje del Bierzo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 3 de mayo de 2002