Alfonso Reyes, con el balón en la mano, salta sobre el alemán Demirel. / REUTERS
Tiros libres mortales
Un nefasto inicio de partido y un detalle final tan técnico como los decisivos tiros libres de última hora echaron a perder la brillante remontada de España en el tercer cuarto y rompieron su sueño de meterse en las semifinales del Mundial. Alemania será quien se dispute una plaza para la final con Argentina, que derrotó a Brasil por 78-67. Fue un mazazo para la maravillosa generación de jugadores españoles.